Los mamíferos han desarrollado la capacidad de correr y saltar por diversos motivos, siendo los más comunes su necesidad de alimentarse, para cazar, o para librarse de depredadores que puedan poner en riesgo sus vidas.
Incluso, los delfines saltan en su medio acuático para captar oxígeno y poder respirar.
Pero llama poderosamente la atención que existe solo una especie entre los mamíferos que no tiene la capacidad de saltar. Se trata del elefante, que debido a su gran tamaño y peso es incapaz de saltar.
Motivos aparentes
Si se analiza a detalle la estructura ósea del elefante, se puede apreciar que tiene rodillas en la mitad de sus extremidades, las cuales no podrían resistir a una caída tras un salto, ya que podrían romperse por el gran peso de los elefantes, los cuales pueden llegar a pesar hasta 6 toneladas y medir unos 3 metros y medio de altura.
Se estima que posiblemente lo que condujo a que estos mamíferos no desarrollaran articulaciones que les permitan saltar a diferencia de otras especies, es que por su gran tamaño, no tienen muchos depredadores naturales de los cuales pudieran escapar por medio de saltos. En cambio, han desarrollado la capacidad de nadar de una manera extraordinaria.
Otro de los factores que incide en la incapacidad de saltar de los elefantes es la estructura de su columna vertebral, la cual tiene un diseño que le permite soportar el gran peso que caracteriza a los elefantes. Sin embargo, ésta no presenta gran flexibilidad, lo que limita la posibilidad de que puedan doblarse para tomar impulso durante el salto.
Por su parte los tobillos son bastante flexibles, aunque una vez más, estas articulaciones se verían afectadas al recibir el impacto del peso completo del elefante al saltar.
Así que por todos estos motivos, el elefante es el único mamífero que no puede saltar.
