La belleza no siempre tiene por qué partir de la perfección.
La mejor demostración de ello es Moffy, una joven modelo británica que está triunfando a pesar de tener un pequeño, pero llamativo defecto: es bizca (padece de estrabismo).
La pasada primavera la chica posó por primera vez para una portada de revista, ‘The Pop’, lo que no tardó en convertirse en su pasaporte al estrellato.
Y es que en agosto de 2013 Moffy firmó un contrato con la agencia ‘Storm’, la misma que descubrió a Kate Moss; mientras que a finales de año John Haro, autor del influente blog ‘Fashion Copious‘ aseguraba «estar súper fascinado con ella».
Todo un ejemplo de que las imperfecciones también pueden ser bellas.
