La de copiar en un examen es una estratagema que a diario usan multitud de niños, jóvenes y adultos en todo el mundo.
En el caso de ser vista lo normal es que la persona se lleve un suspenso y tenga que irse a septiembre, pero en Bangladesh las cosas van bastante más allá.
De hecho, en el año 1992 el gobierno de este país situado al sur de Asia aprobó una ley que permite encarcelar a las personas mayores de 15 años que sean cazadas haciendo trampas en los exámenes finales.
Además, la medida va acompañada con una campaña anual en los medios de comunicación en la que se recuerda a los estudiantes lo que podría pasar en caso de ser pillados cometiendo este ‘delito’.
Aunque no son los únicos, pues en 2009 en China también fueron noticia ocho padres y profesores tras ser condenados a cárcel por favorecer esta práctica.
(Ambien)
