La pintora mexicana Magdalena Frida Carmen Kahlo Calderón, ‘Frida’ Kahlo (1907-1954) se caracterizó por ser una mujer poco convencional que construyó su personalidad a fuerza de los graves problemas que tuvo durante su infancia.
Con seis años contrajo una poliomelitis que la obligó a pasar varias veces por el quirófano y la dejó una pierna más pequeña que la otra.
Además, con 18 años sufrió un grave accidente que la hizo pasar otras 32 operaciones a lo largo de su vida, por lo que su concepto de la belleza acabó siendo muy particular.
Y es que la norteamericana era abiertamente bisexual y no tenía problemas en dar una imagen de sí algo masculina.
De hecho no solía depilarse el bigote e incluso gustaba de autorretratarse con este pequeño ‘bozo’ debajo de su nariz.
Su amiga Chavela Vargas llegó a comentar en una ocasión que le había preguntado si quería usar su crema contra el vello, a lo que Kahlo contestó «¿Y a ti quién te ha dicho que me quiera quitar el bigote? ¡Si me encanta!».
