Cuando un perro vive en una casa, no tiene la oportunidad de moler sus garras de forma natural, incluso si camina varias veces al día, esto todavía no es suficiente.
Es por ello que debemos realizar un corte de la misma de forma habitual, ya que las uñas al crecer causan muchos inconvenientes a la mascota.
Microheridas: Estas lesiones constantes puede generar daños graves si logran infectarse.
Cambio en la marcha: el perro se ve obligado a poner las patas de cierta manera para evitar lesiones, lo que puede provocar problemas del sistema musculoesquelético.
Sensaciones dolorosas: la garra que crece y se retuerce, clavándose dolorosamente en la piel. Por lo que el perro siempre tendrá una sensación de dolor que no logra controlar.
Asimismo, por sus uñas largas, la mascota puede causar lesiones involuntariamente a lo que lo rodea durante el juego. Además de arruinar accidentalmente la tapicería del sofá, los asientos del automóvil, entre otras cosas.
La respuesta es positiva, absolutamente todos los perros necesitan cortarse las uñas. Con una particular necesidad destacan las razas pequeñas, que pasan la mayor parte de su tiempo llevando o en manos de sus dueños. (whereyouwatch.com)
La regla relacionada con la higiene regular de patas y uñas se aplica a todos. Aunque existe una excepción aplicable solo para aquellos perros que son excepcionalmente activos y pasan la mayor parte de su tiempo en juegos activos en la calle, corriendo sobre asfalto duro.
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