La tiña de los pies o pie de atleta es una infección que está provocada generalmente por hongos microscópicos.
Dicha afección está provocada por tres tipos diferentes de hongos: el Trichophyton rubrum, el Epidermophyton floccosum y el Trichophyton interdigitale.
Estos agentes patógenos, que pueden contagiarse al pisar suelos húmedos y por el uso prolongado de zapatillas de deporte fabricadas con fibras sintéticas, se desarrollan principalmente entre el tercer, cuarto y quinto dedos del pie y llegan a provocar auténticas molestias.
Los síntomas más frecuentes de esta micosis son enrojecimiento, picores, sensación de quemazón y aparición de ampollas, grietas y escamas en la zona infectada.
El pie de atleta se trata con un fungicida, como el clotrimazol, y una escrupulosa higiene personal.