Existen una serie de enfermedades asociadas a la higiene bucal; pero son dos las que especialmente aparecen de manera regular y que afectan a un gran número de personas. Se trata de la caries y la gingivitis.
La gingivitis es una inflamación de las encías, que se presenta como un enrojecimiento alrededor del perímetro de los dientes, el cual se acompaña de un ensanchamiento de la piel y un aumento de su volumen.
Eventualmente la gingivitis viene acompañada de una capa de sarro que se aloja en la superficie de los dientes, y que usualmente es difícil de retirar.
Una vez que se intenta retirar, se produce un sangrado bucal, que es frecuente y doloroso. En los casos donde no se presenta la capa blanquecina, de igual forma la presencia de bacterias propicia la inflamación. (Ultram) Por lo tanto, está es una enfermedad bucal de las más importantes a tratar.
La buena noticia es que los síntomas de la gingivitis se pueden evitar con un tratamiento adecuado y la correcta higiene bucal.
¿Por qué se produce la gingivitis?
Las enfermedades bucales recurrentes cómo la gingivitis se producen por una serie de factores, como la presencia excesiva de bacterias, acompañado de una deficiente higiene bucal, que provoca la aparición de la capa blanquecina que se aloja entre los dientes y las encías.
Tratamiento
Para tratar efectivamente la gingivitis, es necesario acudir a un médico especialista que pueda determinar la presencia de la enfermedad y proceder a retirar de manera eficiente la capa bacteriana que provoca la inflamación y el sangrado.
Además, es necesario adoptar una correcta higiene bucal a diario, de manera que se pueda crear un ambiente poco propenso para la proliferación de las mismas. Este es uno de los aspectos más importantes a considerar para tener una boca saludable, sin enfermedades y especialmente, libre de gingivitis.
