Emily Blunt (Londres, 1983) es una de las actrices de la nueva generación que poco a poc se está empezando a hacer un nombre dentro del panorama de estrellas de Hollywood. Uno de sus últimos trabajos ha sido junto a Tom Cruise en la película ‘Al filo del mañana’, una cinta de Ciencia Ficción con espectaculares efectos especiales. Por ello el diario ‘El Mundo‘ la entrevistó recientemente, por lo que la británica tuvo la oportunidad de hacer varias curiosas confesiones sobre su vida provada. De hecho, Blunt desveló que nunca pensó en ser actriz durante su niñez, aunque empezó a actuar «porque me lo recomendaron para superar mi tartamudez, y fue algo que enseguida me gustó. (…) Hubo un día, alrededor de los 18 años, en que tuve claro que quería dedicarme a esto durante el resto de mi vida».
Su problema ya parece estar totalmente resuelto, pues ahora no la falta trabajo en la industria. Aunque ella siempre que puede intentar llevar a cabo su plan ideal: «me gusta invitar a unos amigos a tomar una copa de vino tranquilamente. Me he convertido en una gran cocinera y, a no ser que me engañen, mis platos triunfan bastante. Cuando estoy sola también soy una gran lectora. Prefiero la ficción a la no ficción y me encantan las novelas históricas». Una pasión casi comparable a su aficón por las galletas Oreo, pues confiesa que «en eso tengo que controlarme, pero ¡están tan ricas!. Si me pongo, puedo comerme una caja entera en un santiamén».
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